Los propietarios no han probado que tuvieran intención de ocupar la vivienda que tenían cedida en arrendamiento. La simple alegación de que deseaban realizar obras de adecuación y mejora general de la finca y específicas para adaptar el baño a la minusvalía de uno de ellos no ha sido acreditada. El simple traslado de algunos enseres al inmueble no puede constituir un acto de ocupación, dadas las circunstancias personales de los propietarios y dada la prueba testifical propuesta por los demandantes, los cuales han llamado a declarar a diversos vecinos del mismo edificio en el que antes habitaban, y éstos manifiestan que desde el mes de julio de 1993 nadie ha ocupado la vivienda. Se acredita la conducta abusiva de los demandados, que consiguieron desalojar de la vivienda a los inquilinos al amparo de una causa de necesidad que se ha demostrado inexistente.