(Civil) Contrato por el cual uno de los contratantes se obliga a prestar un servicio a la otra parte durante un tiempo determinado o sin fijación de un plazo concreto a cambio de una retribución proporcional al tiempo o calidad de los servicios prestados. El arrendatario se compromete a desarrollar una cierta actividad, pero no a un resultado concreto.
encicl.jurídicabiz14